Cuanto más a menudo hacemos una actividad, mejor lo hacemos. A pesar de toda rutina: deben seguirse medidas de protección. Debido a que la rutina también conduce a la autocomplacencia y disminuye nuestra conciencia de riesgo: como algo siempre ha salido, nuestra atención disminuye. No puede preverse de antemano cuán peligrosa puede ser una situación. Lo que usted y su personal deberían saber sobre los riesgos inesperados de seguridad y cómo usar este tema de manera significativa, es lo que aprenderá en esta publicación.
No esperamos que suceda algo imprevisto.
Los accidentes de trabajo y las lesiones suelen ocurrir de forma inesperada. Pero, ¿por qué ocurren? Echando un vistazo a la segunda parte de nuestra serie “Cambio de paradigma en la seguridad laboral“, es mucho más fácil comprender las lesiones impredecibles. Esto también se aplica a los riesgos de seguridad anteriores. Después de todo, solo hay tres fuentes de eventos inesperados que causan lesiones y accidentes:
- Mal funcionamiento de una máquina, un dispositivo, el equipo, etc.
- Otra persona comete un error crítico.
- Uno comete un error crítico: esta es la causa del 95 al 98 por ciento de los accidentes.
Las causas específicas de lesiones y accidentes rara vez son previsibles. Sin embargo, un patrón de condición-error relativamente simple puede identificarse como la causa más común de accidente. Porque ciertas en todas las situaciones posibles, tendemos a cometer ciertos errores. Y pasan una y otra vez.
¿Por qué es tan normal estar sin la preparación necesaria?
Esto se aplica a todo tipo de sectores e industrias. Se ha vuelto obvio lo generalizado que es este patrón cuando escuchamos todas las experiencias personales de las personas con las que trabajamos en nuestros talleres y capacitaciones. Es precisamente en este “no estar preparado” que los participantes en nuestros talleres continúan informando una y otra vez cuando hablamos de errores no intencionales y cuando les cuentan a los demás sus propias experiencias (por ejemplo, accidentes y cuasi accidentes). Al analizar los acontecimientos e intercambiar información con otros, los participantes aprenden a reconocer mejor los riesgos auto inducidos en el futuro y a comportarse de manera preventiva.
Una persona en movimiento necesita toda su atención
Especialmente cuando nos movemos, debemos centrar toda nuestra atención en lo que estamos haciendo. ¿Cuántas veces nos hemos despedido de la persona con la que acabamos de hablar mientras mirábamos hacia atrás cuando ya nos estábamos moviendo en la dirección opuesta? En esta situación cotidiana, un cable de extensión no asegurado, una ventana inclinada o una puerta entreabierta le pueden jugar una mala pasada.
Esto es aún más cierto en la era de los teléfonos inteligentes. Alguien que mira a su teléfono celular en lugar de ir pendiente por donde va, se pone en peligro a sí mismo y a otros. Lesiones graves e incluso muertes pueden ser el resultado. Según un estudio británico, el número de peatones que mueren en el tráfico porque su teléfono inteligente los distrae aumenta en un tres por ciento cada año. Para otras ciudades europeas, no hay cifras confiables, la policía generalmente no hace estadísticas sobre accidentes de peatones con teléfonos inteligentes. Sin embargo, una encuesta piloto realizada por DEKRA en Stuttgart, Alemania, mostró que la propensión a usar un teléfono inteligente durante la caminata parece aumentar (más sobre esto en DEKRA Road Safety)
La conexión entre riesgos de seguridad inesperados, conciencia y energía cinética concierne tanto a los peligros del lugar de trabajo como a los personales.
Evite las distracciones a través del comportamiento seguro en la vida cotidiana.
Así que hay diferentes causas para las distracciones. Somos particularmente propensos a ello cuando estamos cansados, frustrados, apresurados o complacientes. En estos momentos, aumenta el riesgo de que no podamos responder adecuadamente a lo inesperado, simplemente porque no estábamos totalmente involucrados en el asunto y no teníamos nuestra mente y nuestros ojos en la tarea.
Siempre esté atento a lo que está haciendo. Especialmente si está tentado de mirar el teléfono mientras corre a través de las filas de estantes en el supermercado justo antes de la hora de cierre, busque el ingrediente olvidado para la cena y luego pierda la señal de advertencia sobre el piso mojado. ¡Esté atento y espere lo inesperado!
(Imagen: © Konstiantyn Zapylaie | stock.adobe.com)